Los últimos días en la Riviera Maya, más de lo mismo, o lo que es lo mismo: disfrute, diversión, descanso, risas y charlas con los amigos... y al final unas lagrimitas de despedida, de esas que riegan el terreno de la amistad y que hacen que siga creciendo.
La casa de Anuska y Ramón está encajada en el manglar que rodea Puerto Morelos y desde la terraza teníamos la vista de Juantxo un lagarto de casi tres metros que además un día se animó a salir a saludarnos a la calle y se puso de modelo para la foto.
Un día nos fuimos a Isla Mujeres y aparte de disfrutar de lo lindo de la isla, el trayecto, el baño en los arrecifes llenos de pececillos de colores y hermosos corales. Vivimos en directo una de esas tormentas que se forman en el Caribe en un abrir y cerrar de ojos... tremendo viento, aguacero y ... a disfrutar.
También nos ha acompañado la luna llena lo mismo en Puerto Morelos como en Cancún donde hemos pasado los dos últimos días y la verdad es que ha sido espectacular. La luna llena en el Caribe es de quitarse el sombrero y disfrutar.
De Belice City poco podemos contar... un lugar venido a menos donde los turistas pasan de largo arrugando la nariz, unos en dirección a Tikal en Guatemala, otros hacia los Cayos a disfrutar de la playa y el buceo; pero tiene su encanto. Aquí lo negro adquiere otra dimensión la mayoría de la población es de ese color en sus multiples tonos. El idioma, el ingles-criollo, dificilísmo de entender, pero podemos con todo y claro siempre encontramos a alguien que chapurrea algo de español y entre su chapurreo y el nuestro, pues salimos adelante.
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Los insectos por aquí tienen otras dimensiones... nunca supimos si era un escarabajo o una cucaracha, o un híbrido de ambas, pero daba miedo.
Mañana salimos para Tikal-Flores en Guatemala... un poco de turismo antes de llegar a la City y empezar a trabajar.
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